Un día abres la nevera y está vacía, vas a la cama y no hay sábana caliente, comienza un fuerte dolor en el pecho y no hay a quién acudir ni a dónde ir, reflexión: ¿Qué deseo pedí? ¿Qué me puede estar llevando a esta situación?, no recordé añadir… ¡salud!, añadir sábanas calientes o comida en la nevera… antes de pedir un deseo prioriza, hazlo con las personas antes que las cosas, prioriza los sentimientos, el amor, recuerda, cuidado con lo que deseas que se te puede cumplir, imagínate, una casa grande, preciosa, llena de colores y olores maravillosos, con un porche para descansar, con esos sillones y sofás hermosos, cómodos, en ese color que tanto te gusta, en una tarde de verano con una jarra con una bebida refrescante al lado, en la parte de atrás la piscina climatizada con tumbonas, tumbonas especiales y cómodas, esas que siempre te gustaron, con ese árbol tan bonito y luces de colores con adornos luminosos, ahora piensa, sales al porche no hay nadie, no hay nadie en esa parte trasera, nadie con quien compartir el sofá, está sola, sales a la calle y se ve vacía, silenciosa, reina un silencio sepulcral y tienes todo eso pero no lo puedes compartir, ¿Lo disfrutarías? , porque recuerda… ¡cuidado con lo que deseas, que se te puede cumplir!.
